15.6.09

El nuevo siglo victoriano. Londres

To Nina

Los británicos consideran que Obama les robó el protagonismo en la celebración del 65 aniversario del D-DAY cuando fue de ellos el mérito principal. Se sienten desagradecidos por los franceses que no invitaron a su principal mujer, la reina. Es el orgullo herido de la pérfida Albión que ahora asiste además a un drama de profundidades shakesperianas, de palabras fuertes acabadas en -ón: traición, ambición, conspiración.

Durante la noche del aniversario cayó la negra tempestad. La mañana es fresca y clara, genuinamente inglesa. Desconozco la temperatura en Normandía, pero aventuro que fue la misma. Voy por el camino ya conocido, cabe el Támesis, bordeo charcos y me pican las ortigas. Un cartel lo anuncia como Pedestrian Walk pero debería ser llamado como Runners Walk ya que no hay caminantes (desaparecidos, timoratos) sino básicamente corredoras. Son ellas las lady Macbeths brownianas y ellas las líderes de las diferentes universidades inglesas y americanas (y seguro que españolas), las verdaderas principales mujeres.

Corren más y con más constancia que los cinco pelagatos con los que me cruzo. Enarbolan camisetas de clubes atléticos como los ciervos lucen su cornamenta y hablan fuerte para las costumbres locales, pero ellas son más y por lo visto más preparadas. Son rubias, altas, y fuertes como lo son las remadoras de los clubes de Putney , que bogan paralelas a mi trayecto. Todo huele o recuerda a la vieja y gloriosa Inglaterra. Hay una de las remeras que es pelirroja, que no es ni más alta ni es más fuerte que los demás, pero se destaca. Tiene algo antiguo en su porte, una sombra meridional quizás. Parece como el resto pero es diferente. Es una no correspondencia exacta. Es una de las suyas pero también es una de las nuestras.

Los patos salen en bandada y cruzan el río hacia Fulham y después hacia Chelsea. Algunos británicos se sienten, pensando en la pelirroja más agradecidos a otro sur que no es el francés y los del sur, por una vez, se sienten doblemente agradecidos a los británicos. Estos, ya olvidados sus dramas, miran hacia delante, lejos, donde los patos.

2 comentarios:

Nombre dijo...

"¿Tú también Bruto?" No me imagino a Gordon Brown diciéndolo aunque me da la sensación de que los británicos son muy dados a estas puestas en escena.

Aunque encontraras ortigas, debes alegrarte porque allí las "sendas peatonales" sean de tierra (¿cierto?) y no de cemento (como aquí).

Lo de la mayoría femenina ¿podría tener que ver con la "operación biquini" que aquí se lleva?

¿Pelirroja? A lo mejor era irlandesa.

Juan PEDREGOSA dijo...

Las fotos del domingo 3 parecían más que César, Octavio su predecesor, abrumado pero con ganas de batalla.
Son en efecto de tierra y no de cemento y se agradece.. y un poco de picante ortiguil también.
La operación biquini es afortunadamente perpetua en esos lares: vete a Dinamarca en diciembre y flipas con la gente corriendo.
La pelirroja es la proyección de Nina, mi sobrina de tres semanas, unos añitos después.